Colonia Agrícola de Santa Maria del Vallès
DATOS DEL CENTRO
La primera Colonia Agrícola fue “Las Torres”, en Lliçà de Vall, iniciada en 1928, cuya propiedad era de Ramón Albó y Martí. Estaba destinado a chicos, a pesar de que más tarde, en la misma zona, se crearon unas instalaciones para chicas, era la Colonia de Bellaplana. Los dos centros funcionaron con el nombre de Escuelas Agrícolas de Santa María del Vallés.
Las colonias agrícolas fueron incentivadas por la Obra Tutelar Agraria (OTA) que era una entidad privada que se creó en 1928 y el fundador de la cual fue también Ramón Albó. Era una iniciativa para formar a los jóvenes de los dos sexos para qué, una vez fuera del centro, tuvieran una salida profesional que sería la agricultura y la ganadería, además, también era una manera de repoblar el campo en una época en la que muchos campesinos migraban a las ciudades para buscar trabajo.
Estos chicos y chicas que eran llevados a las colonias agrícolas solían tener unas características concretas: poco inteligentes y en muchos casos analfabetos («las más rudas en los trabajos intelectuales por ser retrasadas o anormales»), sin familia, con una constitución física muy fuerte, a pesar de que también se trasladaban los y las que tenían la salud débil («que estén delicadas de salud y les convenga el campo»).
Como ya sucede en todos los ámbitos de la época, los trabajos para las chicas eran más amplios y diferenciados que los de los chicos. Ellas realizaban las tareas consideradas adecuadas para la mujer incluso en un ámbito más rural: cría de corral y de ganado grande, elaboración de confituras, quesos, herbolario… Además de realizar los trabajos domésticos de todas las instalaciones y la cocina. En el caso de los chicos, estas actividades solían hacerlas trabajadores y trabajadoras externas.